La persona que publicó esta desgarradora historia sobre mi perro describe detalladamente una situación en la que el dueño de un perro anciano lo abandonó en el estacionamiento de una iglesia durante una tormenta. La perra, llamada Lucy por los rescatistas, estaba ciega, enferma y no podía comprender por qué la dejaron allí. Un amable extraño descubrió a Lucy tirada sobre el concreto durante la tormenta y rápidamente llamó a los servicios de emergencia locales en Houston, Texas.
A la llegada del equipo de rescate, era evidente que Lucy se encontraba en terribles condiciones, con los ojos infectados y todos los huesos visibles. A pesar de merecer una vida llena de amor, Lucy se sentía como una carga. Los rescatistas llevaron a Lucy a una clínica veterinaria donde fue clasificada como caso de cuidados paliativos debido a su deteriorado estado. También se descubrió que padecía diabetes.
El equipo de rescate, lamentando no haber podido acoger a Lucy antes, se aseguró de que pasaría el resto de sus días en un ambiente cómodo y bien cuidado. Se acercó a una mujer con experiencia en cuidados paliativos y, después de visitar a Lucy en el veterinario, adoptó oficialmente a Lucy, brindándole un hogar amoroso.
Finalmente, Lucy cruzó el puente del arcoíris. Si bien su nueva familia lamentó su pérdida, se consoló con el hecho de que ella dejó este mundo sintiéndose querida y amada, muriendo con dignidad. A pesar de lo desgarrador de la situación, la historia subraya la importancia de salvar y cuidar a todos los animales.
¡Vale la pena salvar todos los animales!