Decir adiós a un ser querido es verdaderamente doloroso, el vacío de su ausencia perdura en el corazón de quienes lucharán cada día por retomar su rutina mientras lo extrañan. Algunas familias se enfrentan a la dura experiencia de despedirse de un niño que parte hacia el cielo antes de tiempo.

Se despiden de su hermano pequeño con un beso y desde entonces dicen que juegan con él.

Al igual que los Bingham, después del fallecimiento de Milo, de 18 meses, a quien le diagnosticaron leucemia cuando tenía dos años y falleció después de más de un año de batalla el 23 de febrero de este año.

Se despiden de su hermano pequeño con un beso y desde entonces dicen que juegan con él.

“Milo se fue a casa con Jesús esta mañana. Se fue pacíficamente mientras su madre lo sostenía en brazos. Siempre estarás conmigo, hijo mío”, escribió su padre en su página el día del fallecimiento del bebé.

Se despiden de su hermano pequeño con un beso y desde entonces dicen que juegan con él.

Pasaron unas horas cuando Kassady publicó las devastadoras imágenes del momento en que sostuvo por última vez a su pequeño en brazos antes de entregárselo a una enfermera.

“La última vez que cargué a mi perfecto y dulce niño. Su espíritu ya se había ido, pero no podía dejarlo ir. Su cuerpo comenzó a ponerse rígido mientras lo sostenía.

Ya no podía tener sus dedos alrededor de los míos; Vi sus labios tornarse azules, su piel tornarse verde y su lengua tornarse blanca. Finalmente lo entregué a una enfermera que acababa de conocer ese día y la vi alejarse con mi bebé en brazos”, relató la madre.

Kassady Bingham, madre de Lucca y Milo, de 2 años, comparte cómo su hijo mayor se despidió de su hermano pequeño al compartir emotivas imágenes del funeral. Se despiden de su hermano pequeño con un beso y desde entonces dicen que juegan con él.

Lucca le dio un beso a su hermano, sabiendo que había ido al cielo después de una batalla entre hospitales, tratamientos y altibajos.

Se despiden de su hermano pequeño con un beso y desde entonces dicen que juegan con él. A pesar del dolor, la madre encuentra consuelo en la esperanza de reencontrarse con su pequeño: “Parecía más tranquilo que nunca, e incluso parecía que casi volvía a sonreír. Sé que está sonriendo en el cielo. Puede que su cuerpo ya no esté, pero todavía está aquí. Cada día estamos un día más cerca de ti. No puedo esperar a seguir criándote en el cielo con tu cuerpo perfecto y saludable. Mami te ama”, escribió Kassady.

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Kassady y su marido Konnor ofrecen a su hijo Lucca todo el apoyo necesario para afrontar la pérdida de su hermano.

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Lucca siente que su hermano lo acompaña. Le contó a su papá su experiencia y su madre la compartió en Instagram.

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“Hace un par de semanas, entró en mi habitación y dijo: ‘¡Mamá! ¡Tengo que contarte un secreto! Milo viene a jugar conmigo y ¡ahora puede gatear!’”, confió el niño a su madre.

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